La campeona mundial Argentina se proclamó este domingo bicampeona de la Copa América al ganar 1-0 a Colombia en el tiempo extra de la final de Estados Unidos 2024 en Miami, un cuarto título que conquista en apenas tres años y le permite acreditarse la simbólica Triple Corona.
El delantero Lautaro Martínez, a los 112 minutos, marcó el gol de la Albiceleste en el Hard Rock Stadium y se consagró como máximo artillero del torneo con cinco anotaciones.
Con la victoria, Argentina llegó a su decimosexto título de Copa América para situarse en solitario en lo más alto del palmarés del torneo, rompiendo la paridad que mantenía con Uruguay desde 2021.
Un año y medio después de bordar la tercera estrella mundial sobre el escudo, la Albiceleste logró poner un broche de oro a la más exitosa de sus etapas con la llamada Triple Corona, todo un hito tras levantar los trofeos de Brasil-2021 y este de 2024, con la conquista del mundo en Catar-2022 entre ambos torneos continentales.
«El equipo no deja de sorprender, se repone de las dificultades de un partido muy difícil, con un rival muy complicado y sin hacer un primer tiempo bueno, en el segundo mejoramos y merecimos ganar», dijo el seleccionador de Argentina, Lionel Scaloni.
Para Néstor Lorenzo, seleccionador de Colombia, la Albiceleste está «marcando una era» y reconoció que sus dirigidos sintieron el peso del agotamiento por la seguidilla de partidos en corto tiempo.
«De los dos finalistas hay uno que está marcando una era y no es una casualidad. Está marcando una era y que antes de esta era, perdió dos finales de Copa América y una final del mundo», dijo Lorenzo al valorar la campaña de Argentina bajo la conducción de Scaloni.
Una hora y 20 minutos después del inicio oficial del partido, debido a los graves incidentes en el ingreso de los aficionados al Hard Rock Stadium, la pelota rodó en Miami y con ella apareció la primera acción de peligro de Argentina malograda por Julián Álvarez al minuto de juego.
Pero la respuesta colombiana fue rápida a los cinco y siete minutos, primero con una galopada por izquierda de Lucho Díaz, quien soltó un fácil disparo a las manos de Martínez y luego un remate de Jhon Córdoba que pegó rebeldemente en la base del vertical derecho.
A partir de esas acciones, Colombia presionó alto la salida de Argentina, copó su medio campo y se apoderó del control de la pelota con la autoridad de James Rodríguez.
Mientras los cafeteros proponían un fútbol vertical con clara posesión, los campeones del mundo no conseguían ampliar la cancha para descargar por las bandas con Di María especialmente, mientras que Messi poco gravitaba.
Y en ese panorama Colombia tuvo otra situación de gol a los 33 minutos con Lerma, un remate de media distancia que ‘Dibu’ Martínez envió al tiro de esquina.
El segundo tiempo arrancó sin cambios en los equipos pero ganó en emociones, aunque se vio sacudido a los 66 con la lesión de Messi, que abandonó el campo llorando y visiblemente dolorido del pie derecho.
Arias tuvo un remate en diagonal a los 47 que se perdió por el palo izquierdo y luego Dávinson Sánchez cabeceó mal a los 54 en el área pequeña.
La Albiceleste tuvo lo suyo a los 58 con un remate poderoso de Di María que Vargas conjuró bien mandándolo al tiro de esquina, hasta cuando llegó el infortunio de Messi, quien en un intento por pelear la pelota con Mojica, pisó mal en el campo, resbaló y se llevó inmediatamente las manos al tobillo derecho.
Nicolás González ingresó por el Diez, abatido entre lágrimas en el banco, y el de la Fiorentina incluso logró anotar a los 74, pero su gol fue invalidado por fuera de juego de Tagliafico.
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Argentina continuó así escribiendo una historia extraordinaria, una noche soñada en la despedida de Ángel Di María de la Albiceleste y que marcó con un nuevo título la despedida de Messi de la Copa América, una de sus «últimas batallas».
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