Una situación peculiar tuvo lugar en la jornada de este martes en la primera ronda de la etapa previa del Abierto de Australia. Bernard Tomic, jugador australiano nacido en Alemania, cayó en su partido ante el ruso Roman Safiullin por 6-1 y 6-4. Sin embargo, la derrota pasó a un segundo plano ya que Tomic no tuvo ningún tipo de reparos al afirmar en la mitad del partido que tenía coronavirus.

Durante el transcurso del juego, al australiano se le vio bastante fatigado. Incluso por momentos mareado y tomándose el pulso. Cuando iba 2-1 abajo en el segundo set, en el cambio de lado se dirigió a la juez de silla, la brasileña Aline Da Rocha Nocinto y le dijo que se encontraba mal físicamente, pero con palabras muy duras, incluso que lo atendiera el médico del torneo: “Estoy seguro de que en tres días voy a dar positivo. Te lo estoy diciendo. Te invitaré a cenar si no doy positivo en los próximos tres días. Si no, tu me pagas la cena”, comenzó el australiano su relato mientras se quitaba la playera y se secaba con su toalla.

Luego continuó su reclamo, pero se refirió a la organización del torneo, cuestionando el sistema de pruebas de Covid que se desarrollan previo a los partidos: “No puedo creer que nadie esté siendo revisado. Están permitiendo que los jugadores vengan a la cancha con pruebas rápidas en los vestuarios. No hay testeos PCR oficiales. Increíble”, aseguró.

Finalmente, el partido concluyó 6-1 y 6-4 para el ruso en apenas 57 minutos, quien ofreció chocar puños con Tomic en el saludo en la red. Una vez que el australiano volvió a su hotel, publicó en Instagram: “Me siento muy enfermo, estoy de vuelta en mi habitación del hotel. Acabo de hablar con los doctores y me sugirieron entrar en aislamiento. No pueden tratarme aún para evitar contacto (…) Los mantendré actualizados”.

 

Chivas y Atlas jugarán con 60% de aficionados como máximo, en condición de local

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