La selección brasileña se proclamó este domingo campeona por cuarta vez del Mundial Sub-17 al ganar en la final de la edición de 2019 a México por 2-1, con un gol en el tiempo de descuento de Lázaro.

El joven jugador del Flamengo, que le dio la victoria a Brasil en semifinales contra Francia saliendo desde el banquillo, repitió su papel de talismán y marcó el gol del título con un remate en el minuto 90+3, poco después de haber saltado al césped.

Igual que en las semifinales contra Francia, cuando Brasil remontó en los últimos minutos un 2-0 adverso, la ‘Canarinha’ tuvo que remar a fondo en la final este domingo para darle la vuelta al gol con el que México había abierto el marcador, con un cabezazo de Bryan González.

El encuentro fue disputado, con escasa actividad de los arqueros y con un dominio en los primeros minutos por parte de los locales. En la búsqueda por salir con pelota dominada, la selección azteca estuvo en predicamentos en varios lapsos del partido, pero la mala puntería brasileña mantuvo el partido igualado y sin anotaciones.

Para el complemento, con base en el esfuerzo físico y en el volumen de juego, México logró maniatar al conjunto local.  Al minuto 66, una buena conexión entre jugadores del Pachuca le dio al equipo de Marco Antonio Ruiz el gol de la quiniela. El capitán Pizzuto sacó, desde el sector izquierdo un trazo al área brasileña que conectó Bryan González con la testa, haciendo inalcanzable el esférico para el cancerbero rival.

A partir de ahí, con más fe que buen juego, Brasil se fue en busca del empate y lo logró en el minuto 84, cuando el delantero Kaio Jorge transformó una falta dentro del área sobre Gabriel Verón.

Luego de una serie de rebotes dentro del área mexicana, el nazareno lituano Andris Treimanis acudió al VAR y marcó la pena máxima por la falta de Gómez, polémica y discutible. El cobro lo hizo válido Jorge para poner la igualada. Su disparo fue a la derecha del arquero García que alcazó el esférico pero no impidió el tanto.

Cuando todo parecía que se decidiría en la tanda de penaltis, Yan Couto centró un balón desde la derecha y Lázaro lo remató de primera al segundo palo para darle la victoria a Brasil.

Con la victoria, Brasil pone fin a 16 años años sin títulos mundiales en la categoría, que ya había ganado en 1997, 1999 y 2003.

 

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